jueves, 8 de noviembre de 2007

El libro en el ocaso del humanismo

Este es un ameno y poco pretencioso ensayo de Guillermo Fadanelli, en un afán por plantear algunas preguntas en torno al papel de los libros y el oficio del escritor en nuestra actual sociedad:
¿por qué la gente está cada vez menos interesada en leer?


A ver qué les parece este fragmento:

Tenemos casi un siglo asombrándonos frente al espejo. ¿Qué caso tiene dedicarle una página más a la sociedad de masas? Una multitud va a la plaza para protestar por el aumento en los precios de servicios o para exigir la renuncia de un funcionario. Pero la masa en realidad no está en la plaza, es el ojo que mira extasiado a esa curiosa multitud que reclama airada delante de las cámaras de televisión. Después del mitin, los participantes vuelven a sus casas, encienden la televisión, ven sus rostros en el noticiario nocturno, se reconocen, están allí, son protagonistas. Por unos momentos han experimentado la efímera sensación de ser entes históricos que expresan sus convicciones en la plaza pública. Hace unos años, cuando vivía en el centro de la ciudad de México tuve la oportunidad de ser testigo de una escena que aún no he podido olvidar:

Uno de los pisos más altos de una torre de veinte pisos comienza a incendiarse. Las llamas hacen estallar los cristales. Los empleados corren despavoridos escaleras abajo tratando de salvar su vida. No han pasado más de cinco minutos cuando dos helicópteros de las cadenas más importantes de noticias sobrevuelan el edificio. En diez minutos, cientos de periodistas en tierra y aire están produciendo información sobre el accidente. Los últimos en llegar son los bomberos quienes, además, dan muestras de poseer una tecnología precaria, incapaz de competir con el sofisticado equipo de los periodistas. Sus escaleras no son lo suficientemente largas y sus mangueras tienen cientos de pequeños orificios por donde escapa el agua. El gentío, que desde una prudente distancia observa el siniestro, sonríe divertido. Además el buen humor de los espectadores se puede deducir de este episodio que la sociedad invierte más dinero en la comunicación que en su modesto cuerpo de bomberos: el negocio de la exhibición de la realidad no su transformación.

Jean Baudrillard, quien ha escrito varios libros acerca de la sociedad contemporánea, sostiene que no estamos instalados en el drama de la alienación sino en el éxtasis de la comunicación. Una sociedad carente de ilusiones revolucionarias, ansiosa de noticias que ocupen los cuartos vacíos de su memoria. El joven impetuoso y pedante, Simon Tanner, personaje voz de una novela de Robert Walser exclama: “No quiero un futuro, lo que quiero es un presente. Me parece más valioso. Sólo se tiene un futuro cuando no se tiene un presente.” Así parece expresarse la masa, hundida en el éxtasis de las telecomunicaciones: queremos tener noticias sólo de nuestro presente para de esa manera ser futuro sepultando el pasado.

Nuestros vecinos, las personas con quienes tenemos relación en la plaza pública, en el ciberespacio, carecen en general de opiniones razonadas, están saturados de habladurías, son consumidores de slogans, y no es necesario acudir una vez más a Nietzsche o a tantos escritores y filósofos quejumbrosos para probar que los hombres actuales se sienten más cómodos evitando reflexionar o pensar por sí mismos. ¿Pero acaso se quiere un mundo donde todos sean filósofos? En absoluto, nada más pretencioso además de imposible, sólo que quien renuncia a la lectura no se acostumbra a pensar –quiero decir a ser crítico, a establecer diferencias, a reflexionar e intentar comprender la complejidad de lo real– porque no rebasa los límites de ser pura presencia. Deja morir las palabras en la dulce inmovilidad de la superficie.

El hombre contemporáneo prefiere ver, es mirón, desea ser antes que nada espectador, pero su voz interior se empobrece porque no tiene manera de abrirle paso con una gramática: el paso de lo sensible a lo inteligible se pierde para siempre. Una hipótesis distinta es que el hombre lúdico se ha liberado por fin de la gramática, eligiendo la aventura del caos sobre el lógico ejercicio de cualquier ciencia del lenguaje, y renunciando a poner en juego sentimientos intransferibles, imposibles de ser representados. Ojalá esto fuera posible, pero ninguna sociedad contemporánea puede ya elegir ese camino porque el tren corre a una velocidad que no nos permite descender a riesgo de morir en la caída: el tren corre hacia un final predecible y ridículo. El juego, el arte, lo bello, la actividad impráctica como recursos individuales para estar en el mundo suponen riesgos que una sociedad globalizada obsesionada por elevar los niveles de producción no puede permitirse. La hipótesis del triunfo del hombre lúdico hace agua por todos lados.

* * *

En busca de un lugar habitable,
el libro en el ocaso del humanismo.

Fadanelli, Guillermo.
Ed. Almadia, 2006.

* * *

6 comentarios:

Gastón dijo...

trato de imaginareme el ensayo completo, a quienes se enfoca el autor, son, por desgracia, la mayoría de la gente, nó?
saludos Karla :D te mando un beso :D

Luis Angel Martínez dijo...

¡a la mierda los medios de comunicación¡

YOU ARE A GHOST dijo...

Fadanelli es como nuestro Bukowski local, region 4 jejeje, es bueno, y me agrada bastante lo que escribe, pero siempre lo veo bajo la sombra del Buk, mil saludos!

Tito (a.k.a Alernaboy) dijo...

K pex, muy buen fragmento k pusiste...de hecho andamos blogueando algo similar, o como k muy adecuado a mis diarreas mentales...haha!
E scierto k la gente solo kiere ver...pero ni sikiera ven!!! mas bien SCANEAN; pork si vieran, en algun momento de lucidez observarian su realidad...

Los medios no tienen toda la culpa de k la gente ande en la baba, yo diria que la FAMILIA, nucleo de TODAS las instituciones, tiene la mayor parte de culpabilidad; si en los hogares, si papi y mami ya tienen su "record" de que no LEEN, no OBSERVAN o SABOREAN su entorno el engendro va a tener como "metas" y "propositos" ser supuestamente ALGUIEN mas del monton...espero darme a entender haha!
en fin, seguiremos leyendo por estos lugares...
abur!
visita http://alernaboy.blogspot.com

Unknown dijo...

GASTÓN:

así es! vale la pena leer el ensayo completo. si quieres te presto el libro, no lo subí todo porque como te comentaba, no es como en el caso de Parménides que el libro es tan difícil de conseguir que en lugar de perjudicarlo, creo que le hacemos un bien al contribuir a que se difunda su obra. En este caso, se trata de un autor contemporáneo y que vive de sus publicaciones, así que decidí esperar y digitalizarlo sólo en caso de que alguien lo solicitara.

Gracias por los besos... que te regreso duplicados y con sabor a yerbabuena.


PIYAMA PARTY:

a la mierda! a la mierrrrrda!!!

:)


YOU ARE A GHOST:

region 4... jajaaja seguro que sí, y como bien señalas, aún así es muy disfrutable porque pedirle que sea como Bukowski sería bastante para Fadanelli y para cualquiera.

Qué bueno que te pasas por acá, uno de mis primeros rockers, si!! Muchisimos saludos verdes para tí.


TITO:

holaa!! me da gusto que te aportara algo el texto, y que nos compartas un poquito de tus diarreas mentales al respecto :) creo que sí andamos en la misma onda, da mucha pena que la gente cada día ande más dormida y no se le vean ganas de despertar. la música y los libros son para mí el secreto, lo que me hace volar y me regresa a la tierra... y creo que esa es una de las principales razones de ser de este blog, las ganas de compartir lo que me gusta y la intención de dejar bien claro que no estamos conformes con el mundo como es, y que partiendo de las ideas y palabras de otras personas podemos darnos cuenta de que no somos los únicos y que es posible cambiar... creo que con todo eso sería difícil afirmar que no somos humanistas, verdad? el mundo me decepciona cada día más con sus estupideces, pero me es imposible dejar de creer en los seres humanos.

se me hace que tú no sabes quién soy pero yo sí me acuerdo de tí! jajaja días de gloria y demencia en la ilustre fábrica de comunicólogos a la que solíamos asistir!!!

gracias por la visita, el link y el saludo, tito, por acá seguiremos debrayando.

Tito (a.k.a Alernaboy) dijo...

Karliux!
claro k m eacuerdo de ti!!!
como no!!!
oye por favor!! hahaha!
seguimos en contacto...
agregame a tu messenger: alernaboy en hotmail

un beso.